Aunque se tiende en los últimos años hacia un estilo de vida más saludable, lo ideal sería cuidar de la salud desde un punto de vista integral donde métodos como los ajustes quiroprácticos se incluyan, como una herramienta más, en un conjunto de hábitos saludables como hacer ejercicio de forma regular, llevar una dieta sana y equilibrada, practicar meditación, descansar o realizar estiramientos. La salud es lo más importante y en este caso todo suma, más es definitivamente más.
Para entender un poco mejor qué es lo que tu quiropráctico puede hacer por tu salud o en qué te va a beneficiar acudir a una consulta de quiropráctica lo primero que debes saber es qué es la quiropráctica y qué es lo que trata.
¿Qué es la quiropráctica?
La quiropráctica es una especialidad del cuidado de la salud que se dedica al estudio del sistema nervioso. Su objetivo es que el cuerpo pueda trabajar al 100 % de su capacidad, es decir, nos ayuda a funcionar mejor, a gestionar mejor el estrés, a tener más energía y a vivir plenamente el día a día con consciencia, algo así como un ejercicio de mindfulness que devuelve la vitalidad al cuerpo y que nos hace fluir y disfrutar más de la vida.
El cuerpo humano está diseñado para poder curarse a sí mismo, el quiropráctico lo que hace es ayudarle para que no encuentre obstáculos y pueda lograr un mayor equilibrio. Un profesional quiropráctico cuenta con formación superior de entre 5 y 8 años así que conoce perfectamente el funcionamiento del flujo de información del cuerpo y es la persona idónea para eliminar posibles bloqueos y preservar la salud general.
¿Qué es un ajuste?
Es ese click que hace que todo vuelva a fluir correctamente ayudando al cuerpo a repararse por sí mismo. Esto puede parecer prácticamente magia pero es lo que hace un ajuste quiropráctico, dar el primer y necesario paso hacia una salud plena y consciente. Digamos que es un gesto externo que permite al cuerpo comenzar su proceso de sanación desde el interior.
Los ajustes nos dan a los profesionales quiroprácticos la oportunidad de brindar al paciente, con un movimiento específico que además no causa ningún dolor, la llave para restaurar la comunicación en el sistema nervioso, algo que se consigue devolviendo a las vértebras una óptima alineación, eliminando las posibles interferencias que impiden la comunicación con el resto del cuerpo. El efecto de cada ajuste es acumulativo por lo que el cuerpo entra en un proceso de aprendizaje por repetición que le permite recuperarse de una forma más rápida.
Solo un profesional quiropráctico está capacitado para realizar un ajuste de manera precisa y eficaz y, por supuesto, para nosotros la salud es la prioridad de todos, por lo que cualquier persona puede beneficiarse de los saludables efectos de un ajuste, desde niños y embarazadas hasta nuestros mayores, deportistas y personas que quieren llevar una vida más saludable. Todos y cada uno de ellos podrán vivir una vida más plena eliminando las interferencias que hacen que su cuerpo no funcione al 100 %.
¿Qué es una subluxación?
Por desgracia la vida moderna somete al cuerpo a numerosos estresores que son el origen de muchas dolencias y enfermedades. El estrés, el sedentarismo, una mala alimentación, la polución, las malas posturas, hábitos nocivos como el tabaco… son factores que afectan a la salud generando una respuesta en el cuerpo para protegerse: la subluxación. Este mecanismo de defensa, aunque en un primer momento ayude al cuerpo a resguardarse de los agentes agresores, a la larga supone un desgaste que impide que el cuerpo funcione correctamente.
Las subluxaciones son desplazamientos vertebrales que con ajustes quiroprácticos se consiguen corregir, además de prevenir dolencias para cuidar de la salud en general y devolver la armonía y el equilibrio tanto al cuerpo como a la mente.
Como decía Carl Jung “El calzado que se ajusta a una persona le aprieta a otra; no hay una receta para una vida que se adapte a todos los casos.” Esta es la premisa que siempre tenemos en cuenta y asumimos que cada persona viene a nosotros con una historia y que tiene unas características que lo hacen único por eso su cuidado también debe serlo. Es por esto que en la primera visita a la clínica hacemos un estudio en profundidad de la persona para poder hacer un minucioso análisis de sus necesidades y de la mejor técnica e instrumentación para que sus ajustes sean lo más efectivos posible. El cuidado quiropráctico se convierte así en una técnica a la carta que se realiza desde la escucha y el respeto por el cuerpo, la mejor forma de comenzar a fortalecerlo y a devolverle una salud plena.