El bienestar no es solo no sentir molestias, sino también trabajar para prevenirlas y mantenernos saludables. En ocasiones llegamos tarde, y molestias que en principio solo eran eso, derivan en problemas más serios como es el caso de las hernias discales: la consecuencia de un proceso que termina en múltiples problemas.
Es un diagnóstico del que hemos oído hablar cientos de veces, ya que lamentablemente es algo muy extendido. ¿sabes que los discos intervertebrales están formados por un núcleo blando parecido a la pasta de dientes? (es el núcleo pulposo) y está dentro de capas más duras de “piel-pared” fibrosa. Succionan los nutrientes y el líquido de las vértebras durante la noche y su trabajo es absorber los golpes, moverse libremente y proteger las raíces nerviosas de la columna vertebral, que envían mensajes vitales hacia y desde tu cerebro y todo tu cuerpo.
Problema: si los maltratamos inconscientemente durante décadas, sin reflexión ni cariño, ¿qué puede salir mal? : (
A veces tenemos una pequeña lesión en la espalda que limita algo la movilidad en una zona pero seguimos realizando actividad normal porque te sientes bien, no crees que sea un gran problema, pero ahí tenemos también la sublevación vertebral (movimiento anormal y cicatrización) que persiste, ¿qué pasa? que tenemos demasiada presión sobre el disco y tejidos blandos, hasta que un día algo aparentemente pequeño hace que se convierta en un problema muy grande.
Puede ser un viaje largo con algo de estrés, bajar de un vuelo y al coger tu maleta… gran problema. También puedes haber sido muy deportista en tu infancia y juventud, y al dejar de hacer deporte negando a los discos su nutrición normal con lo que se degeneran lentamente…gran problema.
Así podríamos continuar durante horas, y solo hemos hecho una pequeñísima aproximación a uno de los problemas más frecuentes y dolorosos que hay en la población hoy en día.
Pero nos sirve para hacernos una primera idea de la importancia de mantener una correcta higiene de nuestra columna, un cuidado continuo y un mimo a sus componentes que hacen que no tengamos que lamentar grandes problemas.
Seguiremos hablando de este mal que tanto nos afecta para conocerlo más a fondo y así poder entender de qué manera abordarlo si ya lo tenemos, cuidarnos y prevenirlo si afortunadamente no estamos en el grupo de las hernias discales.
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